Con motivo del día Mundial del pueblo gitano, los principales representantes de las asociaciones romanís gallegas anunciaron ayer la creación de una gran federación, con la que lograr la “fuerza” necesaria para “mejorar la integración” del colectivo. Para ello, reclaman el apoyo de la Administración, pero sobre todo el trabajo del “propio pueblo gitano”, sin el que este propósito está “condenado al fracaso”.

De esta manera, tras una reunión en la que trasladaron a la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo, cuáles son los principales obstáculos de este colectivo en Galicia, el presidente de la Asociación Pueblo Gitano, Sinaí Giménez, señaló que el cometido de esta nueva gran Federación será “consensuar acuerdos” e “estudiar vías” para lograr la integración. Giménez también habló de “presentar iniciativas parlamentarias” para crear “normas y bases en las que aguantarnos y exigir lo que nos corresponde”.

Con motivo de la festividad que hoy se celebra, las distintas asociaciones gitanas gallegas también quisieron hacer público un manifiesto, en el que señalaban la vivienda y el trabajo como dos de los principales problemas de las personas de etnia gitana. En este sentido, destacaron la “venta ambulante” como una actividad “que hoy mantiene económicamente a 4.000 familias gitanas en Galicia”, por lo que “cualquier norma o ley que afecta al comercio ambulante debe ser hecha con cautela.

Otra solución propuesta ayer fue “la creación de viviendas sociales destinadas especialmente a los colectivos en riegos de exclusión social”, entre los que destacaron a la comunidad gitana como “la minoría étnica de Galicia con más riesgo de sufrir una situación de marginación social”.

En una línea similar, el presidente de la fundación Open Society, George Soros, denunció ayer que doce millones de gitanos que viven en Europa sufren “la peor forma de exclusión social” que es en su opinión, la étnica, y reclamó apoyo de la Unión Europea para “institucionalizar” la lucha por su integración. Amnistía Internacional hizo un llamamiento parecido al pedir a la UE que tome medidas para “acabar con el ciclo de discriminación, pobreza y exclusión social”.

Por su parte, esta unión de colectivos gitanos destacó la “falta de recursos económicos” y reclamó que las Administraciones gallegas “impulsen partidas reales para combatir esta situación”.